Una auditoría interna revela una nueva vía de financiación ilegal de CDC
El partido puso a la venta decenas de miles de talonarios de entre 50 y 250 euros en efectivo, una especie de tickets que podían adquirirse para efectuar donaciones de forma anónima, ya que hasta 300 euros la nomativa no obliga a identificarse. Así se obtuvieron cerca de 3 millones de euros. A los que hay que sumar la emisión de facturas sin IVA por valor de 1,2 millones de euros y subvenciones públicas que fueron a parar a fines distintos a los previstos.
La investigación indica además que el expresidente de Cataluña tenía el control total de la administración catalana, por lo que se le atribuye un papel fundamental en la adjudicación de las obras por las que el partido cobraba sobornos. Para Artur Mas se trata de una persecución contra el proceso independentista.
El informe añade el alto poder que Andreu Viloca, el extesorero del partido, tenía en todas las operaciones económicas, gracias a un documento firmado por Artur Mas que le otorgaba ese poder. La minuciosa reconstrucción de los papeles triturados, que la Guardia Civil halló en su despacho, es solo parte de la abundante documentación incautada en ayuntamientos y empresas vinculadas a la trama del 3%.
