'Serranía en vía': ocho estaciones de tren rehabilitadas para conocer la Serranía Baja conquense

Estación de la Gramedosa

cuencatren

Sara Santos Beato
Seguir al autor

En septiembre empiezan las obras en la primera de las estaciones de tren abandonadas de Cuenca del proyecto "Serranía en vía". A esta primera estación, la de La Melgosa, se añadirán en los próximos meses otros siete apeaderos por los que discurrirá un tren turístico para conocer a fondo todos los encantos de la Serranía Baja conquense.

La Diputación Provincial de Cuenca daba a conocer hace unos días el Plan de Recuperación de Antiguas Estaciones de Tren "Serranía en vía". Dicho plan contempla la rehabilitación de ocho estaciones de la línea férrea Cuenca-Utiel, así como la dotación posterior de nuevos usos y la puesta en servicio de un tren turístico. De esta manera, pretende fortalecerse La Serranía Baja conquense como destino turístico.

La estación de la Gramedosa es una de las más espectaculares. Se construyó en unos pinares en medio de la nada, dicen, que por razones de estrategia militar. Aquí irá un museo ferroviario cuyas obras, junto a las del resto de estaciones, empezarán antes de acabar el año.

Cada estación tendrá un uso diferente y en algunas de ellas habrá hasta posibilidad de alojamiento. Un tren turístico se encargará de recorrerlas todas, conectado así la "Serranía en vía".

"Amparados por la Fundación Nacional de Ferrocarriles Españoles, desde Madrid hasta Valencia, hasta donde termine esta línea, pues hacer posible un viaje diferente" explica Benjamín Prieto, presidente de la Diputación de Cuenca, como motivo de esta ruta.

Diferente porque permitirá conocer a fondo el patrimonio natural y cultural de la Serranía Baja conquense. Una comarca surcada por el Cabriel y habitada desde tiempos inmemoriales.

Habrá numerosas cosas que ver y sitios que visitar. "Las pinturas rupestres de que están muy cerca o, como no, Las Chorreras de Enguídanos, la ciudad de Moya, que la tenemos a pocos kilómetros o Cañete, esa ciudad amurallada. O también, cómo no, pues hacer un recorrido por el Cabriel, por esa Reserva de la Biosfera" explica Prieto.

A ellos hay que añadir el influjo que siempre ejerce el tren y el encanto de unas estaciones ideadas por Secundino Zuazo, uno de los arquitectos más destacados de la primera mitad del siglo XX.

Temas

¿Desea recibir alertas con las últimas noticias?

not_supported_text.placeholder