Obligados a sacrificar reses por la sequía y el aumento de los precios
La sequía está dejando el campo sin pastos y obligando a los ganaderos a comprar más pienso y cisternas de agua. Un sobrecoste en transporte y alimentación que unido al aumento del precio de los piensos, y de la energía, hace imposible el mantenimiento del ganado. El aumento del sacrificio de animales en el matadero empieza a ser la solución. Sólo en Toledo se ha sacrificado el 40% de cabezas de bovino en dos meses.
La sequía ha dejado el campo sin pastos ni agua y eso está haciendo estragos en las explotaciones ganaderas de ovino y vacuno de la Castilla-La Mancha, que están viviendo serias dificultades.
La tabla de salvación es el precio de la carne o la leche que se mantiene al alza
Muchos ganaderos han aumentado el gasto adquiriendo pienso y cisternas de agua para alimentar a los animales, y en otras explotaciones han tenido que sacrificar cabezas. Un sobrecoste para un sector que está viviendo uno de los años más complicados con el incremento de los precios en los insumos, la energía o los carburantes.
La tabla de salvación es el precio de la carne o la leche que se mantiene al alza y en parte está compensando los gastos. Para todos el panorama es incierto y prevén unos meses complicados si la situación no mejora.