8M

Mujer, senior, inmigrante o con discapacidad... busca empleo

Virginia, Ángeles y Libertad han compartido con CMM su periplo en la búsqueda de trabajo estable, un proceso en el que fundaciones y organizaciones han tenido un papel determinante 

Imagen de Virginia, Ángeles y Libertad, tres mujeres que en su camino hacia la estabilidad laboral han recurrido a diferentes recursos de asociaciones y fundaciones para conseguir trabajo estable

Imagen de Virginia, Ángeles y Libertad, tres mujeres que en su camino hacia la estabilidad laboral han recurrido a diferentes recursos de asociaciones y fundaciones para conseguir trabajo estableDigital CMM

Susana Palomo Gómez
Seguir al autor

Mujer, de una determinada edad, nacionalidad, con una grado de discapacidad... marca, más aún si hablamos de una etapa de nuestra vida: la laboral. Todas estas condiciones cuentan a la hora de buscar un empleo. Son como palos en la rueda de una sociedad que sigue discriminando aunque cada vez se afirme que se acorta esa brecha de género y se promueve la inclusión social. 

Pese a las dificultades que les pone el mercado laboral, las protagonistas de este reportaje caminan con determinación y optimismo hacia esa meta: conseguir un trabajo estable y con un salario digno, uno de los retos vitales más importante y clave para no estar entre las 12,7 millones de personas que en nuestro país viven en riesgo de exclusión social, según datos de AROPE.  

Empezar de cero 

Libertad es inmigrante, de Cuba. Tiene 58 años y una hija de 14 con la que forma una familia monoparental. Un "equipo", como dice ella, que sale adelante gracias a la ilusión y tesón de esta mujer que llegó a España en 2022 "con unos pocos ahorrillos" y sin la validación de sus estudios. 

Pese a estar licenciada en Química y tener 20 años de experiencia en administración de hoteles hispano-cubanos, en España su currículo estaba vacío: sin formación acreditada, en nuestro país partía de cero. 

Pero Libertad no da una batalla por perdida. Comenzó aceptando trabajos de economía sumergida: cuidado de mayores, de mascotas. Lo que saliera, no rechazaba nada. 

"Me costó mucho encontrar trabajo. Había que abrir camino"Libertad

Empezó por hacer cursos de ambientales, después de administrativo. Encadenó  varios trabajos temporales y se hizo con el certificado de exclusión social. 

"La edad es importante. Cuando pasas los 50 años, prácticamente no sirves para nada. Pocas personas te dan la oportunidad"Libertad

Lo hizo para sobrevivir y engordar su currículum. Para ello tocó las puertas de la Fundación Adecco o Cáritas. A través de ellas se formó y amplió conocimientos y así hasta hoy . Actualmente teletrabaja en una empresa que le ha ofrecido un contrato indefinido. 

 Dos años después de llegar a España y con la tranquilidad de tener un salario fijo,  ya se plantea cambiar una habitación alquilada por una casa entera para ella sola y su hija.

Ser mujer, mayor y la discapacidad también te abre camino

Ángeles es auxiliar administrativo. Tiene una discapacidad auditiva del 33%. "No es limitante solo me tienen que repetir de vez en cuando las cosas", me explica. Siempre ha tenido trabajos temporales, "de seis, ocho meses, un año... nada fijo". 

Acaba de cumplir los 60 años y actualmente está en activo. Ha conseguido cubrir una baja temporal después de entrar en el programa 'Vulnerables', de la Fundación Adecco.

"Picoteas en un lado, en otro... vuelves a casa por tema de cuidados y porque te despiden y los niños te reclaman "Ángeles

 Llevaba ocho años sin trabajar y conforme entraba y salía del mercado laboral e iba cumpliendo años, se sentía más insegura y obsoleta. No necesitaba el trabajo hasta que se divorció. "Ahora, las circunstancias mandan". 

"Siempre hay que mirar lo positivo. Ser mujer, mayor y la discapacidad, también te abren caminos. Hay empresas que buscan estos perfiles"Ángeles 

"No hay mal que por bien no venga", me apostilla.  Y tras pasar por el paro, el SEPE y mandar el currículum a amigos, al final por suerte o porque su perfil esta vez ha jugado a su favor, está trabajando. 

"Estoy muy contenta. Poco a poco aprendo más cosas y va saliendo todo"Ángeles

Aspira a tener trabajo fijo pero antes no quiere dejarse nada en el camino. "De todo se aprende", dice, y quiere aprovechar cada oportunidad. 

Desde junio está en ASISPA, una institución que da cursos a asistentes sociales de centros de día, residencias... Ella está detrás de su formación. Prepara cursos para auxiliares domésticas. Se puede decir que ayuda a otras mujeres como las orientadoras de Adecco lo hicieron con ella. 

"Tener una discapacidad y ser víctima de violencia de género me ha hecho más fuerte"

Virginia tiene 51 años y una discapacidad visual. Tiene 27 dioptrías en cada ojo.  

"Mi graduación visual no me impide trabajar porque llevo mis lentillas. No me limita, al contrario me ha hecho más fuerte" Virginia

En su caso, la discapacidad tampoco le ha limitado, al contrario, le ha acercado a la ONCE, COCEMFE, Inserta y Cruz Roja no solo para buscar empleo sino para seguir creciendo en lo profesional y personal. Es tan inquieta que con su currículo está capacitada para hacer multitud de trabajos: en guarderías, ayuda a domicilio, prevención de riesgos laborales, camarera de pisos... ha sido incluso auxiliar de vigilante en el Museo del Ejército.

"Mi discapacidad me ayuda a seguir formándome. Me ha permitido aprender"Virginia

 Virginia ha aprovechado cada curso que le han ofrecido en las empresas en las que ha trabajado y en las fundaciones y asociaciones a las que ha acudido. 

"Si unimos la discapacidad con la violencia de género tienes más probabilidad de que puedas encontrar un contrato"
Virginia

Virginia fue una de las primera mujeres en acceder al programa Mujeres en Modo On que atiende a mujeres con discapacidad y que han sufrido en algún momento violencia de género.  Una casuística que las orientadoras de Inserta Empleo detectaron que se repetía en no pocos casos.   

Desde 2020, han asistido a 236 mujeres en esta situación en Castilla-La Mancha, 193 mujeres forman parte del Proyecto Mujeres en Modo On. Han conseguido 41 contratos para ellas.

Virginia a día de hoy habla de su experiencia en el maltrato en cada presentación de "La voz del coraje". Un libro con 14 testimonios de víctimas que animar a salir adelante a muchas más. Es "una experiencia que contaría una y mil veces". 

El papel del tejido social

Afortunadamente cada vez existen más recursos y sensibilidad para tender la mano a este colectivo.

Durante 2023, solo la Fundación Adecco atendió a 16.548 mujeres de nuestro país. 

Libertad, Ángeles y Virginia son tres realidades que demuestran que sigue siendo necesaria la intervención de instituciones, organizaciones y fundaciones para acompañarlas en su inserción laboral

Conocer sus especificidades, desechando prejuicios, es aprovechar su talento y canalizar todo ese potencial. Hacerlo es de justicia o ¿cumplir 60 años ha sido un impedimento para la empresaria catalana Sol Daurella, presidenta de Coca-Cola o ser sorda para la oscarizada actriz Marlee Matlin?¿Alguien pone en cuestión la valía de Ana Peláez en la ONU?

¿Desea recibir alertas con las últimas noticias?

not_supported_text.placeholder