23 años esperando sentencia: la historia de un caso atascado en los juzgados de Toledo
23 años ha tardado en resolverse el caso más antiguo que había en los juzgados de Castilla-La Mancha. El pasado mes de diciembre, tras más de dos décadas en un cajón, seis acusados eludir hasta 1. 500 millones de las antiguas pesetas en el pago de impuestos derivados de su negocio de gasolineras quedaron libres por falta de pruebas. Los hechos ocurrieron en 1995.
El juzgado de lo penal ha intentado todos los años celebrar el juicio. "Es un caso flagrante de falta de recursos y falta de medios", dice Julio Moralejo, secretario general del Colegio de Abogados de toledo, "y de falta de dotación presupuestaria".
Dos décadas después, se ha conseguido celebrar. Los seis acusados han quedado absueltos por falta de pruebas. Durante 1995 presuntamente no pagaron los impuestos derivados de su negocio: la explotación de gasolineras y la venta de combustible. El fraude alcanzó los 1.500 millones de las antiguas pesetas y el caso ha permanecido en los cajones 23 años.
En Castilla-La Mancha hay 9 jueces por cada 100 mil habitantes, la ratio más baja de España. El juzgado de los mercantil número 1 de Toledo es el más saturado de la región con una carga de trabajo de un 1.200 por cien.
Los sindicatos se han quedado sorprendidos al comprobar que los presupuestos solo contemplan 100 plazas vacantes de las 300 prometidas.
