Termina un año hidrológico inmejorable en la provincia de Guadalajara, con unas reservas en los pantanos de Entrepeñas y Buendía cercanas a los 1.400 hectómetros cúbicos. Pero también en la cabecera del Tajo esperan las nuevas reglas del trasvase que hagan reducir los envíos de agua al Levante.