Mónica, de víctima de violencia de género a educadora en igualdad

Si la violencia de género es una lacra de la que es difícil salir, aún lo es más es un pueblo pequeño. Lo han dejado patente en la sección 'Castilla-La Mancha llena de vida' de 'Castilla-La Mancha Hoy' la presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (Fademur) en la región y una de sus 'activistas y educadoras', vecina de Chozas de Canales, en Toledo.

En Radio Castilla-La Mancha, Mónica ha relatado su sufrimiento durante su matrimonio. Llevaba muchos años soportando violencia psicológica, económica y sexual. Hasta que un día dijo hasta aquí. 

"Me amenazó con violarme porque no quería tener relaciones sexuales y decidí sobre todo por mis hijos dar el paso" para dejar atrás esta vida de maltratosVíctima de malos tratos

" Es una situación muy difícil porque todo el mundo te conoce. Te sientes juzgada, observada... pero ahora lo digo con orgullo porque he podido salir", ha explicado Mónica.

Ella no llegó a denunciar a su marido porque le aconsejaron no hacerlo. "Me liberé con el divorcio" pero asegura que por hoy por hoy sí lo hubiera denunciado pese a la complejidad que supone demostrar un maltrato psicológico. 

Trabajadora actual en Fademur, lleva su testimonio y este aprendizaje a un programa que se llama "Cultivando igualdad" que trabaja a través de talleres dirigidos a niños desde 3 años hasta mayores de 65 esta materia. "Siempre con la visión de la igualdad y luchando contra la lacra de la violencia", apunta Mónica. 

"La violencia es la misma pero hay menor recursos"

Elisa Fernández, presidenta de Fademur en Castilla-La Mancha recuerda que la violencia machista en el ámbito rural aunque es la misma que en las ciudades, la clave es que en un pueblo todo se sabe y los recursos a los que acceder no están tan cerca y en un elevado porcentaje las víctimas los desconocen.

"Las víctimas de maltrato sufren : la vergüenza al qué dirán, la culpabilidad, el miedo a las consecuencias y la incertidumbre ante un futuro incierto"Elisa Fernández, presidenta de Fademur

"Lo vemos a diario. El ámbito rural es un territorio más machista. Ahí es donde vemos que hay que incidir más y empezar con la educación pública y privada en igualdad" porque han visto que en la lucha por la igualdad y contra la violencia  la educación es clave e imprescindible. 

Por eso, Fademur, como se pudo comprobar en el último programa de 'Solidarios' de Radio Castilla-La Mancha, ha puesto el foco en estos talleres que llegan a jóvenes y adolescentes porque "hemos detectado un repunte de violencia en estos chavales de instituto".  "Hay muchos casos en los que no saben reconocer la violencia o el control o consentimiento". 

El mensaje de esperanza en el que ambas han quedado incidir es en "animar a las mujeres que se sientan amenazadas a romper la barrera y no seguir con ese miedo ni un minuto más".