Disturbios en la jornada de huelga general en Venezuela

Elena Garcia Fermosel
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La oposición venezolana ha convocado una huelga general de 24 horas en todo el país para protestar por la elección de la Asamblea Nacional Constituyente, convocada para el próximo 30 de julio e impulsada por el presidente Nicolás Maduro.

El paro cívico, que ha comenzado a las 6.00 hora local (12.00 hora española) y que ha tenido un seguimiento desigual en diversas zonas del país, supone una intensificación de las protestas opositoras. Por la acción espontánea de grupos, autodenominados "resistencia", extensas zonas del este de Caracas y de otras ciudades del país permanecen bloqueadas desde el martes.

Ambiente devastador al este del país

Las calles están vacías, los comercios cerrados y las avenidas bloqueadas en los barrios del este de Caracas, zona controlada por la oposición venezolana. Allí desde el amanecer grupos de estudiantes han levantado enormes barricadas y han organizado piquetes. A media mañana las fuerzas de seguridad comenzaban a cargar contra algunos de estos piquetes.

Lo único que permanece abierto en esta zona son los bancos. Las sucursales bancarias se han visto obligadas a abrir sus puertas después de que el gobierno ha decidido a última hora pagar las pensiones en esta jornada.

Mientras tanto, en el oeste de la ciudad el panorama es muy distinto: los edificios públicos sí han abierto sus puertas. La oposición denuncia que el gobierno está amenazando a los casi 3 millones de trabajadores públicos para que acudan al trabajo.

La Guardia Nacional Bolivariana de Venezuela (GNB) ha comenzado a cargar contra los manifestantes en algunos barrios y ha dispersado algunas protestas opositoras en varias zonas de Caracas. En otros la llamada resistencia, se ha preparado para hacer frente a las fuerzas de seguridad.

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