Castilla-La Mancha, segunda región con mayor tasa de siniestralidad laboral

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Redacción CMM
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Castilla-La Mancha ha sido, durante el primer semestre de 2017, la segunda región con una tasa más elevada de siniestralidad laboral y ésta ha afectado de forma especial a los inmigrantes, entre los que los accidentes graves se sitúan un 37 % encima de los registrados en la población autóctona.

Así lo ha destacado la secretaria regional de Salud Laboral de CCOO, Raquel Payo, que ha comparecido en rueda de prensa para hacer una valoración de la siniestralidad laboral de la región durante los primeros cinco meses del año, en los que se han registrado un total de 11.248 accidentes, de ellos 14 mortales y 91 graves.

Estos datos sitúan a Castilla-La Mancha como la segunda región, detrás de Baleares, con una tasa de siniestralidad más elevada, concretamente de 1.948 accidentes por cada 100.000 habitantes, a lo que, según Payo, se une el "deshonroso dato" de que Guadalajara y Toledo encabezan el ránking de accidentes a nivel nacional y la primera provincia se sitúa un 27 % encima de la tasa regional.

Detrás de estas "preocupantes cifras", ha recalcado la responsable regional de Salud Laboral, están la precariedad, la rotación y la temporalidad, así como el hecho de que, en Castilla-La Mancha, la gestión preventiva, desde que empezó la crisis, está por debajo de la media nacional.

En este contexto, Payo ha confiado en que el Acuerdo Estratégico para la Prevención de Riesgos Laborales alcanzado recientemente en esta comunidad sea "un impulso que, con el compromiso de los empresarios y la inversión empresarial, logre sacar a Castilla-La Mancha del cajón de cola en materia de siniestralidad".

Por sectores, la mayor siniestralidad se registra en el sector servicios (55,23 por ciento), seguido por la industria (22,29 %), la construcción (12,35 %) y el sector agrario (10,14 por ciento).

A juicio de Payo, la situación de "máxima debilidad" en la que se encuentran las empresas castellano-manchegas en materia de prevención hacen que la siniestralidad crezca y especialmente entre el colectivo inmigrante, donde la tasa de accidentalidad está un 16 por ciento por encima de la de la población autóctona, pero en el caso de los accidentes graves sube hasta el 37,7 por ciento.

Ha significado igualmente que la población inmigrante supone el 9 por ciento de todos los afiliados a la Seguridad Social en Castilla-La Mancha, pero sufren el 10,4 % del total de los accidentes.

En este punto, la dirigente sindical ha reclamado "una mayor vigilancia y control para que afloren los accidentes que no aparecen en las estadísticas" debido a que muchos inmigrantes que sufren accidentes en las campañas agrícolas, al no estar dados de alta o, al menos, no durante toda la jornada, no aparecen en los registros.

En este punto, el técnico de Empleo y Migraciones de CCOO, Hassen Rejbi, también presente en la rueda de prensa, ha recordado el caso del empresario detenido y otros cinco investigados en Las Pedroñeras (Cuenca) por tener a más de 50 trabajadores dentro de una nave "sin las mínimas condiciones de seguridad y salud laboral".

Así, ha proseguido, en las visitas que realizan durante las campañas agrícolas, comprueban in situ la situación y condiciones en que viven los temporeros, que en muchos casos son familias enteras con niños "viviendo en condiciones infrahumanas", ha dicho.

Y se ha referido también al gran número de temporeros que, en la campaña del melón, están viviendo en polígonos industriales y casas en ruina abandonadas en Tomelloso y Cinco Casas (Ciudad Real".

En este contexto, Rejbi ha señalado que, en el campo se necesita mayor control para llevar a cabo el cumplimiento de la normativa, que recoge la obligación de facilitar alojamiento y de cotizar por las jornadas reales, lo que les ha llevado a solicitar la reunión de la Comisión de Flujos Migratorios el pasado mes de mayo, pese a lo que aún no han obtenido respuesta.

EFE

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