CIUDAD REAL
El científico del CSIC Antonio Turiel alerta sobre la especulación detrás del auge del biogás en España
Turiel ha señalado que el biogás se presenta como una solución “cuando en realidad ni es rentable ni sostenible a gran escala”.

(Foto de ARCHIVO) Imagen de una planta de biogás. 21/7/2025
El físico del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Antonio Turiel ha advertido que el auge de proyectos de biogás y biometano en España responde más a la “desesperación de los gobiernos” y a intereses especulativos que a una estrategia energética real y sostenible.
En declaraciones este miércoles 8 de octubre en Ciudad Real, donde ha impartido una charla, Turiel ha dicho que este tipo de proyectos "se fomenta por desesperación, pero también porque hay especuladores que saben que van a sacar beneficio, aunque las plantas no sean rentables".
El investigador, experto en recursos energéticos del Instituto de Ciencias del Mar del CSIC, ha contextualizado el momento actual del sector y ha explicado que la extracción de gas “está llegando a su máximo a nivel mundial” y que Europa, tras la crisis del suministro provocada por la destrucción del gasoducto Nord Stream, “busca suplir el déficit con producción local”.
“Esa situación ha desencadenado una carrera por implantar plantas de biogás en toda Europa, especialmente en zonas rurales de España, bajo la premisa de aprovechar residuos agrícolas que, en realidad, ya tienen otros usos”, ha apuntado.
Turiel ha considerado que la transición energética “se está improvisando” y que el biogás se presenta como una solución “cuando en realidad ni es rentable ni sostenible a gran escala”.
Ha apuntado que “las plantas de biogás implican impactos ambientales significativos”, y que “todo eso ocurre para mantener un modelo que energéticamente y económicamente no ha sido nunca rentable ni lo será”.
En su opinión, “la única forma de que el biogás tenga sentido sería en instalaciones pequeñas y vinculadas a su entorno, por ejemplo, una granja que procese sus propios residuos”.
Sin embargo, ha añadido, “en cuanto se supera cierta escala crítica, los problemas ambientales y económicos se multiplican y solo se sostienen por las subvenciones”.
Por su parte, Toni Jorge, miembro de Ecologistas en Acción de La Manchuela y de la plataforma Pueblos Vivos Cuenca, coincidió en que el actual modelo de desarrollo del biogás en Castilla-La Mancha “se ha diseñado a medida de los grandes lobbies gasistas”.
Jorge ha criticado que el Plan Regional de Biometanización “no pone límites al tamaño de las plantas ni contempla modelos adaptados a los territorios, sino que prioriza la inyección a la red gasista, el más rentable para las energéticas”, y ha aseverado que de los 55 proyectos en tramitación en la región, cinco se han desestimado, pero“ los 50 restantes tienen un tamaño medio de 155.000 toneladas”.
Ha alertado además de los riesgos ambientales del “digerido”, el residuo que generan estas plantas que “si no se trata adecuadamente, puede contaminar suelos y acuíferos; y el coste de tratamiento es tan alto que la mayoría de promotores optará por el camino fácil: repartirlo en el campo con el visto bueno de un gestor autorizado”.
EFE