BIEN DE INTERÉS CULTURAL
Una iglesia de Ciudad Real y los danzantes de Méntrida, declarados Bien de Interés Cultural
La iglesia de Nuestra Señora de los Olmos en Torre de Juan Abad (Ciudad Real), y la tradición de los Danzantes y Mayordomos de Méntrida (Toledo), se incorporan a la lista
Iglesia Nuestra Señora de los Olmos
La lista de Bien de Interés Cultural (BIC) de Castilla-La Mancha cuenta con dos nuevas incorporaciones: la iglesia de Nuestra Señora de los Olmos en Torre de Juan Abad (Ciudad Real) en la categoría de monumento, y la tradición de los Danzantes y Mayordomos de Méntrida (Toledo) en la condición de bien inmaterial.
El Consejo de Gobierno de esta semana ha decidido declararlos nuevos Bienes de Interés Cultural en la región. La consejera portavoz del Gobierno, Esther Padilla, ha destacado el "alto valor patrimonial" de ambas manifestaciones culturales y la "necesidad de dotarlas del máximo grado de protección".
Tras los dos BIC aprobados hoy, serán 12 los bienes aprobados entre 2019 y 2023. En total, 678 en toda la región.
Danzantes y Mayordomos
Danzantes y Mayordomos de Méntrida
La tradición de los Danzantes y Mayordomos de Méntrida ya estaba reconocida como Bien de Interés Turístico Regional, lo que consiguió dar "más visibilidad a esta fiesta", recuerda Padilla. Este nuevo BIC ha puesto en valor la riqueza etnológica de su indumentaria, cargada de simbolismo y confeccionada artesanalmente. La portavoz destaca los rituales de sus danzas y alardes y las ancestrales melodías populares que sirven de soporte musical a esta tradición.
En cuanto a la vestimenta, los mayordomos visten uniformes inspirados en las milicias hispanas del siglo XVII.
Iglesia Nuestra Señora de los Olmos
Esta iglesia es el segundo Bien de Interés Cultural, declarado en la categoría de monumentos, que se encuentra en la Torre de Juan Abad (Ciudad Real).
Las manifestaciones de este espacio litúrgico se encuentran muy bien preservadas y son un reflejo de la función y simbología que tenían y tienen, "lo que le proporciona un importante valor como conjunto religioso manteniendo sus usos y funciones plenamente enraizados en nuestra cultura", comenta Esther Padilla.
La iglesia fue fundada por la Orden de Santiago y está construida sobre una pequeña capilla de planta rectangular que ya existía en 1243. Se puede apreciar su impronta en la cruz, la espada característica de los caballeros santiaguistas, en los frontones del templo.
La traza actual data del siglo XV, pero su mayor parte es de los siglos XVI y XVII, con predominio de estructuras renacentistas, además de sufrir varias reformas hasta el s. XVIII. Esto es un claro ejemplo del proceso renovador de las iglesias parroquiales en La Mancha que, durante el siglo XVI, supusieron la consolidación de la arquitectura tardo gótica y la aceptación del nuevo lenguaje renacentista llegado de Italia.
