Luto en la Puebla de Almenara tras la muerte de dos vecinos en la riada de Saelices (Cuenca)

Daniel Urda Banegas
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El ayuntamiento de la Puebla de Almenara, en Cuenca, ha decretado tres días de luto oficial por la muerte de dos de sus vecinos en la riada que el pasado sábado tuvo lugar en la localidad de Saelices.

Las banderas del consistorio ondean ya a media hasta, en el segundo segundo día de luto, por la muerte de estas dos personas, un matrimonio de unos 70 años.

La tormenta les sorprendió cuando regresaban a casa en su coche.

El matrimonio estaba jubilado y hasta hace unos años regentó una panadería en este municipio, de poco más de 300 habitantes, ubicado a unos 18 kilómetros al sur de Saelices.

El cuerpo sin vida del hombre fue encontrado sobre la 01:00 de la madrugada y el de la mujer a las 9:30 de la mañana del domingo por el grupo de actividades subacuáticas de la Guardia Civil (Geas).

En concreto, en una zona entre Saelices y Casas de Luján.

Un pueblo "destrozado" por la tragedia

Tal y como ha expresado el alcalde del municipio, Luis Miguel Bustos, el pueblo está "destrozado" por la tragedia, al tratarse de dos vecinos "muy queridos en el pueblo", que deja huérfanos a dos hijos varones y una hija.

"Venían de Madrid de ver a un hijo que estaba enfermo y les pilló esa nube terrible", ha manifestado el primer edil, que ha trasladado a la familia "el cariño del todo" el pueblo.

También, se ha comunicado con la alcaldesa de Saelices, Paloma Jiménez, que le ha trasladado su pésame, y otros cargos como el presidente de la Diputación, Álvaro Martínez Chana o la delegada de la Junta en Cuenca, Mari Ángeles Martínez, se han puesto en contacto con Bustos para expresarle su pesar por los hechos.

Una riada de gran magnitud

Los bomberos de Tarancón participaron en el rescate de varias personas, que quedaron atrapadas en sus vehículos en las inmediaciones de la CM-310, a la altura del parque arqueológico de Saelices.

También tuvieron que achicar agua durante varias horas en un complejo hostelero de Casas de Luján, donde un centenar de personas participaban en una boda.

Según los bomberos, la riada fue de tal magnitud que la fuerza del agua arrastró alpacas de paja de más de 2.000 kilos. .

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