Los sicarios pudieron dejar su trabajo sin terminar, según el psiquiatra forense José Cabrera

Sólo cuando concluya la investigación en curso podrán despejarse todas las dudas en torno a este brutal crimen, que todo apunta  a que podría tratarse de un ajuste de cuentas. Los agentes han visto que hay rejas por toda la casa y que no se habían forzado ni puertas ni ventanas. Lo que les lleva a creer que las víctimas dejaron entrar en la vivienda a sus asesinos. Por el momento, lo que se sabe es que parece el trabajo de un grupo de sicarios. Y que, además, podrían haber dejado su tarea sin terminar. Según el psiquiatra José Cabrera, les ha faltado la recogida de los cuerpos. De ahí, que hayan aparecido en el comedor de la vivienda dentro de bolsas de basura.

La hipótesis del ajuste de cuentas ejecutado por sicarios explica también, en caso de confirmarse, que con los niños no se haya procedido de la misma manera que con los padres. Para José Cabrera, la razón es simple: sus cuerpos sí cabían completos dentro de las bolsas. Todo esto pone de manifiesto que no se tuvo ningún miramiento con las víctimas.

Este modus operandi se ha visto ya, de forma habitual, en Sudamérica. En este caso, como en otras ocasiones, la banda ha perseguido a sus víctimas allá donde han intentado ocultarse. Ero los expertos lo dejan claro: no es probable que esta forma de actuar se generalice en países como el nuestro.