90 muertos y 463 heridos en un atentado en Afganistán

Elena Labrado Calera
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Hasta ahora, ningún grupo armado ha reivindicado este atentado, que, según el último balance, ha dejado 90 muertos y 463 heridos, y los talibanes han negado ser los autores del ataque. Se habla ya de uno de los peores atentados sufridos en Afganistán en los últimos años.

Era la hora punta en Kabul, en uno de los distritos más concurridos, la zona de las embajadas, también, uno de los preferidos por terroristas. La hora, elegida para provocar el mayor daño posible. Un camión del servicio de alcantarillado estalla frente a la embajada de Alemania, con el balance más sangriento de los últimos años, decenas de muertos, casi todos civiles, y entre ellos varios niños.

Los heridos se cuentan por centenares: "estaba en mi oficina, explica uno de ellos, se me vino encima el escritorio y cristales". En un radio de 200 metros no hay edificios sin daños: "nuestra tienda está destrozada, dice este propietario, y uno de nuestros empleados, herido, en el hospital". Hay una treintena de coches calcinados o destrozados.

El atentado se produce en el mes más sagrado para los musulmanes, el Ramadán, y, ahora, centenares de militares armados vigilan el distrito. Todavía nadie ha reivindicado el atentado y, aunque todos los ojos estaban puestos en los talibanes, estos se han desvinculado en un comunicado.

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