AGRICULTURA
La cosecha del Azafrán de La Mancha registra la cifra más baja en 11 años: 280 kilos
Una cifra que supone una caída del 40,24 % con respecto al año anterior, 2022 (462,15 kilos).

Recogida de la flor del azafrán. Rey Sotolongo / (Foto de ARCHIVO)
La campaña 2023 en la zona de producción de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Azafrán de La Mancha ha registrado la cosecha más baja de los últimos once años con 280,81 kilos recogidos, una caída del 40,24 % con respecto al 2022 (462,15 kilos).
La presidenta del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Azafrán de la Mancha, Valentina Cabra, ha expresado que es "una bajada increíble que reafirma que el sector está como herido de muerte".
"Tenemos un problema estructural y el cambio climático no ayuda", ha indicado Cabra, que ha explicado que las altas temperaturas que hubo en octubre retrasaron el inicio del cultivo y afectaron a la floración de las plantas, repercutiendo de manera directa en sus malos resultados.
La cifra de este año es un 49,1 % inferior a la media de producción de los últimos diez años, que se sitúa en 571,58 kilos, un descenso claro que se aprecia en la producción; el rendimiento, 3 kilos por hectárea en 2023, el más bajo de los últimos diez años; y en la superficie, que ha pasado de las 105,26 hectáreas en 2022 a las 93,2 en 2023.
La presidenta del Consejo Regulador ha expresado que es "necesario dotar al sector con un soporte económico que permita que esta caída se frene", además de tener un buen estado sanitario de los bulbos y la mecanización, que al no existir en este cultivo, "el relevo generacional no termina de llegar".
En este sentido, Cabra ha explicado que más bien necesitan ayuda para desarrollar muchas máquinas por parte de empresas porque, según ha indicado, este sector "es una excepción" y no existe mecanización en él.
Con respecto al estado sanitario de los bulbos, el gerente del Consejo Regulador, Pedro Manuel Pérez, ha explicado que no se ha trabajado nunca en su saneamiento, lo que ha provocado que estén en una situación "muy grave" porque las patologías "afectan indudablemente al desarrollo de los cormos del azafrán".
"En Albacete hubo grandes inversiones y en tres años los cormos se tuvieron que desechar. Por ello, en los últimos años hay productoras que han preferido comprarlos en Holanda, que los dan con un certificado sanitario del Gobierno holandés y su respuesta ha sido muy satisfactoria porque están sanos", ha indicado Pérez, que ha subrayado que "quién va a invertir con cormos que se van a desechar".
Por otro lado, la presidenta del Consejo Regulador ha anunciado que si persiste "esta tendencia a la baja, va a ser muy difícil que el Consejo Regulador siga vivo porque se mantiene de las cuotas de sus asociados".
"Sin esas cuotas, el Consejo Regulador no puede seguir adelante", ha alertado Cabra, que ha añadido que se han visto obligados a reducir al mínimo sus actividades de promoción de la marca de calidad.
Por todo ello, ha demandado "ayuda urgente a las autoridades competentes y a quien corresponda para poder sacar y reactivar este cultivo y que no muera".
fmc/cst EFE