José Domínguez, víctima de ETA, habla sobre el desarme de la organización terrorista desde Argamasilla de Calatrava
Una de las víctimas del terrorismo de ETA reside en Argamasilla de Calatrava, Ciudad Real. José Domínguez recibía los disparos de un comando terrorista en la Foz de Lumbier; fallecía un compañero suyo. 27 años después de aquel atentado, este guardia civil ni olvida ni perdona.
José Domínguez ha leído el último documento hecho público por ETA, y su contenido no le convence. Para este sargento de la Guardia Civil, todo es una mentira de los terroristas. Es, en momentos como éste, cuando recuerda a tantas víctimas inocentes.
En junio de 1990, veía cómo asesinaban a un compañero suyo, mientras que él sufría disparos en la cadera, al ir identificar a varias personas en la Foz de Lumbier.
José asegura que siempre soñó otro fin para el terrorismo. A pesar del tiempo transcurrido, sigue manteniendo que los atentados destrozaron a su familia y esto nunca lo perdonará.
