La polémica en torno al convenio sanitario con Madrid

Este lunes se ha reunido la comisión de seguimiento del Convenio Sanitario suscrito entre Castilla La Mancha y la Comunidad de Madrid, un acuerdo que afecta a los vecinos de las provincias de Toledo y Guadalajara más cercanas a Madrid.  Este acuerdo supone la posibilidad de que pacientes de nuestra región sean atendidos en hospitales que, por cercanía, se encuentran en la comunidad de Madrid. En la agenda repasar las facturas que tiene que pagar Castilla-La Mancha y la posible renegociación del acuerdo.

Un convenio que Castilla La Mancha quiere tratar de renegociar o de rescindir en la parte que concierne a la provincia de Toledo por considerar que no fue un buen acuerdo cuando se firmó. Se elaboraría uno nuevo, sólo para la provincia de Guadalajara, por cuestiones geográficas.

Coincidiendo con esta reunión la Plataforma en Defensa del Convenio Sanitario de la comarca toledana de La Sagra ha registrado en la sede del SESCAM más de tres mil firmas para solicitar ser atendidos en los hospitales públicos de Madrid, más cercanos a sus municipios. José Luis Funes, el coordinador de la plataforma, ha calificado de "vergüenza" que en este momento no se esté atendiendo a nadie en la parte que afecta a la provincia de Toledo y exigen al presidente de la región, Emiliano García-Page que dé orden a los centros de salud para que deriven "a los hospitales más cercanos".

La Plataforma para la Defensa del Convenio Sanitario entre Castilla-La Mancha y Madrid ha anunciado que va a denunciar al presidente de la región, Emiliano García-Page, si "en el plazo de 30 días" no recibe respuesta del Ejecutivo regional para que entre en vigor el convenio sanitario entre ambas comunidades. "Se nos engañó, lo cual es gravísimo", ha lamentado Funes, porque "se nos dijo que prácticamente no había personas apuntadas y, con posterioridad, la consejería rectificó y dijo que no es que hubiera poca gente sino que había tantísima, más de 22.000 personas, que había tenido un colapso administrativo y que daba seis meses más de plazo para que entrara en vigor".

Fernando Mora, viceconsejero de Administración Local y Coordinación Administrativa, aseguraba aquí, en Radio Castilla la Mancha, que la prestación de servicios en el complejo hospitalario de Toledo es más amplia que la que pueden ofrecer los hospitales más cercanos de la comunidad de Madrid.  En cuanto al convenio entre ambas comunidades autónomas, considera que se puede llegar a un entendimiento. Ve razonable y necesaria su aplicación en los municipios de Guadalajara, pero no así con Toledo.

Reacciones políticas

Las posiciones de PP y PSOE son bien conocidas. Los populares han vuelto a insistir en que el Ejecutivo regional no puede cargarse un convenio que costó tanto tiempo poner en marcha. Ana Guarinos, presidenta del grupo popular en las Cortes ha dicho que "no pueden tomarnos el pelo" y no pueden dejar de atender las reivindicaciones de las provincias beneficiadas.

El PSOE le recuerda que no peligra la asistencia sanitaria de ningún ciudadano del norte de Toledo o la provincia de Guadalajara, pero insiste en que la sanidad pública de Castilla La Mancha no está para sanear los hospitales privados de Madrid. Blanca Fernández, portavoz socialista en las Cortes regionales, ha dicho que pondrán "en cuarentena" las firmas y califica "de maniobra orquestada por el Partido Popular" esta polémica.  Además ha ofrecido datos. En la provincia de Toledo, ha dicho, sólo 17.000 personas se quieren acoger a este convenio.

Fue en 2015 cuándo el anterior Gobierno regional presidido por María Dolores Cospedal suscribió este convenio con la comunidad de Madrid. Aseguraban que beneficiaría a 380.000 habitantes. 120.000 pertenecientes a la provincia de Toledo y 260.000 de Guadalajara.