GUERRA COMERCIAL
Claves del documento del acuerdo entre la UE y EEUU: no esquiva el 15 % para productos agroalimentarios
La declaración no gusta a las cooperativas agroalimentarias porque creen podría incrementar los costes de la exportación para productos como el aceite de oliva, vino y frutas

Ya es oficial el documento suscrito en julio entre Estados Unidos y la Unión Europea.
Ya se conocen las claves del documento que ponen fin a la guerra comercial entre Estados Unidos y la Unión Europea. Se ha hecho oficial a través de una declaración conjunta adoptada por la Comisión Europea y la Casa Blanca que plasma por escrito el acuerdo logrado en julio.
Se mantiene el 15 % de arancel para los productos europeos y se confirma que el vino y las bebidas espirituosas europeas quedarán sujetas a este gravamen y no quedarán exentos, tal y como solicitaba Castilla-La Mancha.
Eso sí, la Comisión Europea buscará reducir la tarifa que se aplica a esta categoría de productos en futuras conversaciones con EE.UU. Ambos equipos negociadores se han comprometido a seguir explorando en qué sectores se podrían reducir los aranceles en el futuro.
Un acuerdo que no gusta a las cooperativas agroalimentarias porque creen "que es una oportunidad pérdida" porque no hay "ningún cero por cero".
Fuentes comunitarias se mostraron convencidas de que sus homólogos estadounidenses comparten con Bruselas la visión de que se trata de un tipo de productos que "ambos lados manufacturan y disfrutan" y en el que se aprecian especialmente "los valores locales y los tradiciones".
El acuerdo podría incrementar los costes de la exportación para productos como el aceite de oliva, vino y frutas, afectando por tanto a la competitividad de las empresas españolas en el mercado de Estados Unidos, al tiempo que abre la puerta a entrada de productos norteamericanos al europeo.
Si bien España no es de los Estados europeos más expuestos al comercio con Estados Unidos, el país sí representa un destino importante para las exportaciones del sector agrícola y pesquero, siendo el primero fuera de Europa y el sexto de todo el mundo, con un 4,8 % del total de las exportaciones del sector.
Estas ascendieron en concreto a 3.609 millones de euros en 2024, de las que casi un tercio (más de 1.013 millones) fueron en aceite de oliva, el principal producto vendido a EE.UU., seguido del vino y mosto (334 millones) y las legumbres en conserva (247 millones), según datos del Ministerio de Agricultura.
Acceso preferencial de la UE a lácteos, cerdo y frutas estadounidenses
Eso sí, la Unión Europea prevé dar un "acceso preferencial" a su mercado a ciertos productos agrícolas estadounidenses como los lácteos, la carne de cerdo, las frutas y las verduras o los frutos secos, entre otros bienes agrícolas no considerados sensibles para la economía europea.
Además de aceptar este arancel del 15 %, Bruselas ha ofrecido en el marco del acuerdo eliminar los aranceles a los bienes industriales estadounidenses y dar un "acceso preferencial a su mercado a un amplio rango de productos de marisco y agrícolas de Estados Unidos", según recoge la declaración conjunto.
Estos incluyen frutos secos, productos lácteos, frutas y verduras frescas y procesadas, alimentos procesados, semillas para siembra, aceite de soja y carne de cerdo y de bisonte.
La reducción de aranceles se implementará a través de un sistema de cuotas para cada producto específico que todavía no se ha concretado y que "se publicará a su debido tiempo", según explicó la Comisión Europea.
Bruselas defiende que se han quedado fuera de esta oferta los sectores agrícolas considerados "sensibles" para la UE, como la carne de vacuno y de ave, el azúcar, el arroz o el etanol y que se ha optado por dar mayor acceso a productos que la industria europea necesita y que se abaratarán.
Sin embargo, los representantes del sector agrícola critican que el acuerdo tendrá un "doble impacto" para los productores europeos: por un lado el arancel del 15 % que se aplicará a sus importaciones y por otro la rebaja de los que se aplican a los productos estadounidenses.
La declaración conjunta, esperada desde que se cerró el acuerdo político en julio, fija un arancel máximo del 15 % para la gran mayoría de los bienes de la UE que entren en Estados Unidos, incluidos los automóviles, así como los semiconductores y los productos farmacéuticos en caso de que Washington, que tiene una investigación comercial en marcha sobre ellos, decida imponerles aranceles.
Estados Unidos ya aplica este tipo del 15 % desde principios de agosto a los bienes europeos sujetos a los llamados aranceles "recíprocos", que hasta entonces eran del 10 % y que Trump había amenazado con elevar al 30 %.
Por otro lado, en el caso del acero y el aluminio, a los que Washington aplica un arancel del 50 %, el documento solo señala que considerarán "la posibilidad de cooperar" contra el exceso de capacidad en sus mercados, incluido a través de un sistema de aranceles y cuotas, aunque no precisa cómo funcionaría ese mecanismo.
Asimismo, el acuerdo contempla un trato preferencial - con aranceles cero en algunos casos - para ciertos productos estratégicos como las aeronaves, recursos naturales como el corcho, medicamentos genéricos y sus ingredientes y precursores químicos, y prevé que Bruselas y Washington sigan negociando para añadir más bienes a la lista.
La UE, por su parte, ha expresado su voluntad de adquirir gas natural, petróleo y productos de energía nuclear estadounidenses por valor de 750.000 millones de dólares (unos 700.000 millones de euros) en los próximos tres años, así como chips de inteligencia artificial por 40.000 millones de euros (unos 46.600 millones de euros).